Acababa de leer la segunda novela de la serie del Problema de Tres Cuerpos, titulada el Bosque Oscuro. Durante la lectura, tenía en cuenta un argumento, que la Gota, una sonda cósmica de Tres Cuerpos chocaría hacia Tierra dentro de unas horas. O sea, nuestra planeta se derrumbaría en un santiamén. Frente a esta desgracia, los seres humanos se apartía principalmente en dos grupos: disfrutar caprichosamente de la vida y morirse de desesperación.

Conforme leía entre líneas, se me ocurría qué haría yo, enfrentándome a esta situación. Reflexioné unos minutos, pero no tuve respuesta. El resultado no parecía lo que considerabamos antes, sino me sentía ansiosa y nerviosa. Es que tendría mucho que hacer, pero que el tiempo sería demasiado limitado, sólo unas horas, tan reducido como si no lo tuviera. Por fin,decidía que de fallecer todo el mundo, me reunría con mis familias y sentaríamos en un jardín para beber y chalar, así como para meditar sobre lo que había pasado en toda la vida. Entretanto, esperaríamos a la llegada de muerte, y ya sería la hora de descansar para siempre.

Después de declear todo esto, me parece que quedo loca. Por una parte, me sumerjo en esta trama;por otra parte, esto refleja que forma parte de una sobresaliente obra